¿Qué estará pasando tras bambalinas en el “supergabinete”?

¿Qué estará pasando tras bambalinas en el “supergabinete”?

julio 12, 2019 Desactivado Por La Opinión de

El circo: en campaña, el hoy Presidente ofreció trabajar con los mejores, rodearse de los más capacitados y los mejores en su rubro, para iniciar la “reconstrucción nacional”.

La maroma: día a día, Andrés Manuel intenta, infructuosamente, justificar lo injustificable, cubrir el hecho de que no hay gabinete más allá de un sumiso grupo de incondicionales que están dispuestos a lo que sea, con tal de cumplir los dictados de quien dice ser, el único que conoce el país y la solución mágica a todos los problemas (sí, como si aún estuviera en campaña).

La política: ya había renunciado el expanista Germán Martínez a la dirección del IMSS, y con una dura carta que hizo pública, en la que reprochó al Presidente tanto la intromisión en la administración interna del instituto, como el que se buscara ahorrar dinero a costa de la salud pública.

Ahora, ha renunciado Carlos Urzúa, el Secretario de Hacienda. El menos malo del gabinete, el más cercano a estar bien preparado para el cargo que desempeñaba; y eso no es lo más preocupante, lo son las razones que expresa, tan diplomáticamente en su carta de renuncia.

Urzúa nos cuenta que en su Secretaría, uno de los funcionarios más cercanos al Presidente, aparentemente, era quien decidía las contrataciones de servidores públicos, lo cual no tendría nada de raro, o de malo, si no fuera porque de acuerdo al contenido de la propia carta, se han contratado a personas sin experiencia alguna en la hacienda pública.

Por otra parte, Urzúa nos dice que siendo un especialista en economía, el Presidente (que acreditó “de panzazo” la asignatura en la universidad y no tiene experiencia alguna en la materia) impone las decisiones, desde su muy particular modo de ver las cosas. En redes sociales se mencionó y fue trending topic el nombre de la Oficial Mayor de la SHCP, Raquel Buenrostro, como la persona sin cuya venia, simplemente no fluye el dinero hacia dependencia alguna, sin importar si se necesita para salarios, o pues… para medicinas.

La renuncia de Martínez fue una sorpresa, pero la de Urzúa es no un foco rojo, no una señal de alarma, es un aviso de tsunami; López Obrador siempre ha sido autoritario y absolutamente hermético en cuanto a sus proyectos y métodos, pero hoy día es el Presidente de la República y lo que está en juego, no solo es el aspecto económico, sino cada rubro que depende del Ejecutivo. ¿Llegamos hasta el 2019, para retroceder 40 años en libertades?

El pilón: ¿sólo a mí me preocupa el hecho de que el Congreso de Baja California haya dado una extensión de mandato a su gobernador, para pasar de 2 a 5 años? ¿Estoy paranoico o es un experimento sociopolítico para que ello ocurra también en 2024?

Alejandro Arochi

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