México y un semáforo descompuesto
junio 3, 2020Hace dos días iniciamos la “nueva normalidad”, es decir, termina la sana distancia e inicia el semáforo rojo; así como se lee, seguimos en semáforo rojo, pero la sana distancia sigue siendo o no necesaria; eso ya es decisión de cada quien.
Sin embargo, el Gobierno Federal delegó su obligación constitucional de la protección de la salud (Art. 4 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos – CPEUM) a los Estados y ahora, éstos, sin facultades, son los responsables de manejar su semáforo de salud.
Cabe señalar que sólo el Consejo de Salubridad General está facultado para dictar las medidas preventivas en caso de epidemias; lo anterior, con fundamento en el artículo 73, fracción XVI de al CPEUM; se podría decir, que todo lo que hagan los Estados no tiene un fundamento. Es decir, el único semáforo que realmente tiene razón legal de existir es el Federal.
Así como se lee, todo México está circulando con un semáforo de crucero, cada uno lo manipula a su antojo; algunos gobernadores han aprovechado esta oportunidad para sacar tajada política del tema. Mientras tanto, el Gobierno Federal ya aventó la pelota de salud a las 32 entidades; así es, así de fácil están jugando con la salud de todos nosotros.
Así juegan con la salud de nosotros, ahora que hay más contagios; ahora que hay más defunciones y que éstas ya rebasaron las proyecciones; si esto falló, que más no habrá fallado. Por dar un ejemplo de los números del COVID-19 en nuestro país: 97,326 casos positivos y 10,637 defunciones a causa del virus
Ciudad de México ocupa el primer lugar de muertes tras el COVID-19, es casi 2 veces más alto que el número total de decesos en Portugal, que es de 1,424, así como Rumanía que su cifra total es de 1,270 decesos.
Por otro lado, Estado de México ocupa el segundo lugar en decesos con un total de 1,159, superando el número total de muertes en países como Chile con 1,113; Egipto con 1,005, y Polonia, 1,074.
Como podemos observar, el Gobierno Federal, los gobiernos locales, el Congreso de la Unión y los congresos locales están jugando al semáforo descompuesto con la salud de todo nosotros. Las y los mexicanos no nos merecemos que manejen nuestra salud a su antojo; cada pérdida, es una familia en proceso de reagrupación para salir adelante.
No está bien, y lo repito, no está bien que hagan eso con nuestra salud; no es posible que los políticos no se puedan poner de acuerdo con algo tan delicado como la salud, si en esto no pudieron, en lo demás es y será imposible.
Aquí es cuando retomo mi frase, si en 2020 el mundo se detuvo, fue para cambiar y no para seguir igual; sin embargo, nuestro Gobierno y nuestra clase política no cambia.
Mario A. Zapata
Twitter: @MarioAZapataB
Imagen: ID 8385 / pixabay.com