El Presidente y el gabinete están desnudos

El nuevo traje del emperador, cuento de Hans Christian Andersen, retrata la arrogancia y soberbia de un emperador y su séquito, quienes son engañados por estafadores profesionales, los cuales le venden “un traje” elaborado con una tela “muy especial”, que sólo los inteligentes pueden ver y que se vuelve invisible a los ojos de los necios y de quienes no merecen el cargo que ostentan.

Todos son embaucados. Primero los emisarios del emperador, quienes temen ser ridiculizados o despedidos de sus cargos, por no ver las “magníficas telas” con las que los timadores “elaboran” el traje, informan al emperador del gran trabajo que realizan los “tejedores”. Posteriormente el propio emperador acude a supervisar la “confección” de su traje y “queda maravillado” por el “gran trabajo” que realizan los engañabobos.

El emperador estrena “su traje” en un desfile y todos, quienes no quieren pasar por poco inteligentes, dicen verlo y apreciar “su belleza”, hasta que un niño grita que el emperador está desnudo. El emperador queda en ridículo.

En la campaña electoral Andrés Manuel López Obrador y Morena ofertaron a los mexicanos un “elegante traje”, que ellos portarían, pero que los ciudadanos deberían comprar; un traje sagrado, impoluto, con autoridad moral, sin problemas de conciencia, para transformar a México. Morena y su candidato fueron los embusteros.

30 millones de mexicanos, cansados de la corrupción, el tráfico de influencias, el nepotismo, el amiguismo y la falta de resultados de los gobiernos emanados de los partidos que ya habían gobernado, “compraron el traje”, con la esperanza de un mejor futuro para ellos y para sus hijos.

Con el cambio de poderes, el 1 de diciembre, el Presidente y su gabinete “estrenaron el traje”, pero están desnudos; en la autoproclamada cuarta transformación, que ha devenido en una transformación de cuarta, la improvisación y los errores han sido la constante; las adjudicaciones directas, la reforma de las leyes a modo, las decisiones unilaterales y la violación sistemática del Estado de Derecho caracterizan al nuevo régimen.

La sociedad mexicana, esperanzada por el cambio prometido, a dos meses de la entrada del nuevo gobierno y con varios errores, intencionales o no, se resiste a reconocer su equivocación en las pasadas elecciones, en las que entregó todo el poder a un grupo de farsantes, que son todo aquello que prometieron combatir.

Poseedor de un enorme bono de legitimidad, el lopezobradorismo se siente con el derecho de hacer y deshacer; se encuentran en el proceso de aprendizaje, pero lo están haciendo mediante el ensayo y el error; no confían en nadie que no sea López Obrador y sus decisiones. Y López Obrador no lo sabe todo, aunque así lo crea. El gobierno está desnudo y tarde o temprano todos se darán cuenta de que fueron engañados.

LA CUADRATURA

Paco Ignacio Taibo II anunció que habría libros baratos, para promover la lectura en México. La pregunta es, ¿serán libros de todos los temas y de todas las corrientes de pensamiento o sólo textos comunizantes?

Alberto Lugo Ledesma