4T: narcisismo y egolatría política en tiempos del COVID-19

abril 3, 2020 Desactivado Por La Opinión de

Esta semana se ha declarado a nivel nacional la emergencia sanitaria lo que conlleva que la suspensión, cierre de actividades consideradas no esenciales, se extenderá hasta el 30 de abril.

Cabe destacar que esta es una medida que tiene que ir en beneficio de achatar la curva de contagio, pues lo dicho por el Dr. Hugo López Gatell es que la epidemia es inevitable, pero se puede hacer mucho como medida de prevención, con el aislamiento social, ya lo ha insistido el funcionario, que quizá cuando esto pase o antes pueda ser Secretario de Salud u obtener un merecido ascenso en la administración pública federal.

Sin embargo, hay un mensaje que llama mucho la atención durante el anuncio, no lo hizo solamente el área de salud, sino quién declaró la emergencia sanitaria fue el canciller Marcelo Ebrard. Lo anterior da pie a muchas especulaciones o mensajes indirectos por parte del gobierno actual.

Recordemos los siguientes datos, tan sólo el fin de semana el Presidente hizo polémica en las redes por saludar a la mamá de Joaquín Guzmán Loera “El Chapo”; antes de eso el mandatario se ha caracterizado por no acatar en su persona las recomendaciones que hace no sólo la OMS sino su propio personal de salud. Nuestro líder político vive en una crisis que lo ha rebasado en su persona, como en su proyecto autodenominado la Cuarta Transformación, la misma prensa extranjera lo ha señalado como un líder que no toma en serio o tiene inacción frente a esta pandemia que ha paralizado al mundo.

Por eso lo contundente de que la emergencia la dé a conocer el titular de la SRE, pues al exterior proyectan que en México sí se está haciendo algo por contener este problema de salud pública. En tanto López Obrador sigue en su discurso polarizador, dividiendo, encontrando enemigos, o adversarios como él los llama; pues una cosa muy distinta es la oposición, que sí es oportunista, a ciudadanos apartidistas, en los que me incluyó, que vemos con profunda decepción a un líder narcisista, ególatra, lleno de delirios de grandeza y con poder, lo que lo hace más preocupante.

No cabe duda de que este problema ya ha rebasado al gobierno y que de entrar en un escenario peor al que vivimos o se espera, la popularidad, credibilidad, mas no la legitimidad ya que esa a diferencia de sus predecesores la tuvo en automático, que tiene el Ejecutivo se irá perdiendo, para ello los resultados de algunas encuestadoras, medios, calificadoras, etc.

Gildardo Ledesma
Twitter: @gledesmaa24