¿Estás conmigo o en mi contra?
junio 12, 2020Lo anterior es una expresión que ha sido ampliamente utilizada, para trasmitir que una situación está polarizada, buscando muchas veces alinear a la opinión pública con uno de los dos extremos planteados, ya que eso implica que de no unirse a una parte significaría ser considerado como enemigo de la misma.
Tales afirmaciones se hacen para forzar a otros a participar en un conflicto en el que aparentemente no puede darse el lujo de la neutralidad. Todo bajo una falsa lógica de que es la dinámica de la dialéctica hegeliana, sin embargo, los que así lo defienden pareciera que se oponen al ideal absoluto o bien que su postura es lo anterior. Esta idea es en ocasiones juzgada como una falacia lógica de falso dilema o falsa dicotomía.
En la cultura como en la ficción dicha frase ha sido popularizada, desde la Biblia con la expresión: “El que no está conmigo está en mi contra” (Mateo 12:30), hasta el “Si no estás conmigo, eres mi enemigo”, pronunciado por Darth Vader en Star Wars o “El que no es de los nuestros es un enemigo” de Cersei Lannister en Juego de Tronos, por mencionar ciertos ejemplos sencillos.
Bajo esa dicotomía ideológica México se ha sumido por años, sin querer avanzar en unificarnos como país, sobre todo en estos días tan aciagos por no decir complicados y hoy pareciera que en vez de superar ese pasado de confrontación entre buenos-malos, el discurso presidencial nos ha llevado a una guerra civil entre hermanos; en la que si se emite crítica alguna eres denostado, descalificado o vapuleado, tal como he señalado muchas veces en este espacio editorial.
Se torna preocupante que ese discurso de odio siga, se promueva, avale o se financie a través de áreas del sector paraestatal federal, como lo es Notimex; el simple hecho de lo dicho por López Obrador de estar a favor o en contra de la Cuarta Transformación, no por que sus ideas sean retrógradas o descabelladas sino porque insiste en señalar enemigos, calificarlos de conservadores, como si siguiéramos inmersos en esa dinámica histórica que seguimos cargando a la fecha.
Lo peor es que continuamos insertos en esa situación, en redes nos ofendemos, insultamos, por defender o atacar a políticos y que no siempre ellos van a ver por nosotros como individuos, lo que ha resultado por completo un desgaste mental; en lo personal es una situación que como mexicano me tiene cansado, hastiado de ver pleitos, discusiones sin sentido en el que el rojiazul es más malvado que el guinda o viceversa, del “no te quejabas con los anteriores”, del apelativo del “mejor presidente que hemos tenido”, en un afán mesiánico o de non plus ultra.
Gildardo Ledesma
Twitter: @gledesmaa24
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