Salud en México: promesas incumplidas

El presidente López Obrador ha repetido, una y otra vez, como disco rayado, que México tendrá un sistema de salud como el de Dinamarca; el fin de semana expresó que ya lo había pensado bien y que no sería como el sistema danés, sino mejor. Como si se tratará de deseos o pensamientos.

El sistema de salud es un indicador fundamental para el desarrollo de un país; su organización y funcionamiento son primordiales para la calidad de vida de la población. En el ámbito internacional existen diferentes modelos de sistemas sanitarios, uno de ellos es el modelo Beveridge. Este modelo se caracteriza por financiación a través de impuestos, control gubernamental y legislativo, acceso universal, gran participación del Estado en su gestión, así como la existencia de cierto sector privado.

El modelo Beveridge apareció en 1948 como el primer sistema sanitario de cobertura universal en Europa, el cual debe su nombre a William Henry Beveridge, economista y político británico y uno de los responsables de la creación de los planes sociales en favor del sector obrero. Este modelo sirvió para elaborar el Sistema Nacional de Salud en diferentes países: Reino Unido, Suecia, Finlandia, Noruega, Dinamarca, Italia, España y Portugal, por citar algunos. Es decir, el sistema sanitario danés es del modelo Beveridge.

Aspirar a contar con un sistema de salud eficiente en México no está mal, todos lo queremos; pero no se trata de anhelos, sino de realidades, lo fundamental son los recursos destinados al sector salud, lo que propiciaría el mejoramiento y perfeccionamiento del sistema sanitario de nuestro país.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha sugerido a los países destinar el 6% del Producto Interno Bruto (PIB) a su sistema público de salud; Dinamarca destina alrededor del 11% del PIB y México, por su parte, no llega ni al 3% del PIB.

La cantidad de médicos por determinado número de habitantes es esencial, también, para contar con un sistema de salud de calidad; Dinamarca tiene un médico por cada 244 habitantes, México, un médico por cada 417 habitantes; es decir, Dinamarca tiene 100% más médicos que México.

En los últimos años se han realizado diversos estudios que evalúan y clasifican los sistemas sanitarios en diferentes países del mundo. El índice de atención médica, de la revista CEOWorld, evaluó a los sistemas de salud de 89 países en 2022 y encontró que Corea del Sur, Taiwán, Dinamarca, Austria y Japón encabezan la lista. La calidad general del sistema de atención médica, la infraestructura de atención médica, las competencias de los profesionales de la salud, el costo, la calidad y disponibilidad de medicamentos, entre otros, fueron los factores evaluados. México se encuentra en el lugar 29.

Asimismo, el Instituto Legatum, con sede en Londres, elabora el Índice de Prosperidad Legatum, a partir de la evaluación de 167 países; en el cual se establece que Dinamarca es el mejor sistema de salud del mundo, México se ubica en el lugar 71 del índice.

López Obrador hizo el “compromiso”, en diciembre de 2022, que antes de concluir el 2023, México tendría un sistema de salud igual (o mejor, según dicho los últimos días) que el de Dinamarca.

Le quedan menos de nueve meses al año, el presupuesto sigue siendo el mismo, los médicos y enfermeras son pocos y mal pagados, el número de camas es insuficiente, las instalaciones son deficientes, la mortalidad es superior a otros países. Han transcurrido 52 meses del gobierno de López Obrador y la lógica nos dice que esta será otra de sus promesas incumplidas.

LA CUADRATURA

Dice Arturo Zaldívar que la Secretaría de la Defensa Nacional es civil, porque el presidente de la República, el Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas, es civil. El ministro tiktokero está pagando muy caro su escaño en el Senado.

Alberto Lugo Ledesma
Twitter: @albertolugomx

Imagen: Internet