Delincuentes electorales y adelantados electoreros
mayo 26, 2023En México, la democracia se ha consolidado como un pilar fundamental de la vida política del país. Cada proceso electoral constituye una oportunidad para que los ciudadanos ejerzan su derecho al voto y participen activamente en la conformación de su gobierno. Sin embargo, en los últimos años, un fenómeno ha puesto en entredicho la imparcialidad y la equidad en estas contiendas: los actos anticipados de campaña electoral.
A medida que nos acercamos a las elecciones del 2024, el tema de la regulación de estos actos cobra especial relevancia. Los actos anticipados de campaña se refieren a cualquier actividad realizada por un individuo o partido político que busca promover su imagen o propuestas antes del inicio formal de la campaña electoral. Aunque el objetivo de estas actividades es claro, su regulación se ha convertido en un desafío para las autoridades electorales y para el sistema político en su conjunto.
La legislación electoral en México prohíbe expresamente los actos anticipados de campaña, estableciendo un periodo específico, durante el cual los candidatos y partidos políticos pueden llevar a cabo sus actividades proselitistas.
Sin embargo, actualmente funcionarios públicos y legisladores en funciones, que pretenden contender a otro cargo el siguiente año, están en un limbo o vacío electoral que parece abusivo y obsceno.
Lo mismo hemos visto espectaculares, lonas, bardas, con el rostro o nombres de funcionarios estatales, cuyas administraciones no son de Morena, así como de este partido, en un total acto de descaro.
No obstante, existen nulas o pocas denuncias ante el INE o los OPLE’s, principalmente por ser un juego de ver hasta qué punto existe la impunidad electoral.
Esto no es nuevo, ya que en los últimos procesos electorales hemos sido testigos de una serie de casos en los cuales los actores políticos han aprovechado lagunas legales y vacíos interpretativos para adelantarse a la contienda electoral. Estos actos anticipados pueden incluir desde la difusión masiva de propaganda política hasta la realización de eventos con la clara intención de posicionar a un candidato o partido en la mente de los electores.
La problemática radica en que los actos anticipados de campaña generan una desigualdad entre los participantes en la contienda. Aquellos que respetan la legislación y esperan el inicio formal de la campaña se ven en clara desventaja frente a quienes deciden adelantarse. Además, esta situación puede generar una distorsión en la opinión pública y afectar la toma de decisiones informada por parte de los votantes.