Ampliación de periodos legislativos, una necesidad

Ampliación de periodos legislativos, una necesidad

septiembre 24, 2018 Desactivado Por La Opinión de

El Congreso de la Unión, Cámara de Diputados y Senado de la República, tiene 2 periodos ordinarios de sesiones, los cuales, de acuerdo a los artículos 65 y 66 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, se llevan a cabo entre el 1 de septiembre y el 15 de diciembre, el primero, y entre el 1 de febrero y el 30 de abril, el segundo; con una sola excepción, cada seis años, cuando toma posesión el nuevo Presidente de la República.

El artículo 65 establece: “El Congreso se reunirá a partir del 1o. de septiembre de cada año para celebrar un primer periodo de sesiones ordinarias, excepto cuando el Presidente de la República inicie su encargo en la fecha prevista en el artículo 83 de esta Constitución, en cuyo caso se reunirá a partir del 1o. de agosto; y a partir del 1o. de febrero para celebrar un segundo periodo de sesiones ordinarias”.

El artículo 66 marca los límites de estos periodos: “El primer periodo no podrá prolongarse sino hasta el 15 de diciembre del mismo año, excepto cuando el Presidente de la República inicie su encargo en la fecha prevista por el artículo 83, en cuyo caso las sesiones podrán extenderse hasta el 31 de diciembre de ese mismo año. El segundo periodo no podrá prolongarse más allá del 30 de abril del mismo año”.

Es decir, los Diputados y Senadores, por mandato constitucional, sólo tienen la obligación de sesionar de manera ordinaria seis meses y medio; y un máximo de ocho meses, cada seis años.

El Poder Legislativo en el mundo se organiza y trabaja de manera distinta; en la región latinoamericana, México se encuentra entre los países con el menor tiempo destinado al trabajo legislativo: El Salvador sesiona durante todo el año; Bolivia, 11 meses; Ecuador, Nicaragua y República Dominicana, 10 meses; Argentina, Brasil, Honduras, Paraguay, Uruguay y Venezuela, al menos nueve meses; Colombia, Guatemala, Panamá y Perú, al menos ocho meses. La media, en Latinoamérica, es 8.81 meses; México, muy por debajo ésta, sólo sesiona 6.5 meses.

En la LXII Legislatura se presentaron 14 iniciativas para ampliar los periodos de sesiones; en la LXIII, ocho iniciativas en el mismo sentido. Sin duda la ampliación de los periodos legislativos es una necesidad para eficientar el trabajo de los legisladores federales y que éstos logren cambiar la percepción que se tiene sobre ellos. Diputados y Senadores se encuentran entre las seis peores instituciones, de acuerdo con Consulta Mitofsky y su encuesta Confianza en instituciones 2017.

Si a los legisladores federales se les deposita puntualmente su dieta, durante los 12 meses del año, resulta necesario reformar la Constitución y las leyes secundarias, para ampliar los periodos de sesiones; y que tanto Diputados como Senadores sesionen de forma ordinaria todo el año.

LA CUADRATURA

De prosperar las iniciativas de Ley de Morena en el Senado y del Partido del Trabajo (PT) en la Cámara de Diputados, para prohibir el uso de los colores patrios en los emblemas de los partidos políticos, ¿se le podría aplicar al Partido Revolucionario Institucional (PRI) de manera retroactiva?, ¿o debería realizarse una reforma constitucional para poder prohibírselo?

Alberto Lugo Ledesma

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