Mindfulness, éxito y bienestar
octubre 2, 2023El objetivo de esta colaboración es hablar de los beneficios que aporta la atención plena en el ámbito empresarial, ya que en la actualidad podemos experimentar la creciente presión que recae en todas las empresas al encontrarnos en un entorno altamente competitivo y en constante cambio.
Es importante entender que el mindfulness (atención plena) es una práctica con raíces en la meditación budista y que se ha ido adaptando para cumplir con sus principales objetivos que son prestar atención de una manera consciente, para estar plenamente presente en lo que estemos haciendo y de la misma manera funciona como una reducción del estrés. Gracias a sus beneficios podemos ver como universidades como Harvard cuentan con investigaciones muy completas sobre este tema y como el ITAM en nuestro país pone al alcance de sus alumnos y personal sesiones de Hatha yoga restaurativo y Mindfulness en sus instalaciones, por mencionar algunos ejemplos de investigación y práctica.
Lo ideal en el tema específico de los negocios es que el uso de esta herramienta sea impulsar el éxito de las organizaciones, una atención plena se convierte en una solución efectiva para mejorar el rendimiento y bienestar de los colaboradores, obteniendo beneficios significativos tanto para los individuos como para las empresas.
Los talleres, pláticas o cualquier tipo de capacitación enfocada en desarrollar mindfulness para los miembros de la organización, ayuda en gran medida a la reducción de estrés, así como al control de la ansiedad; esto potencializa la producción y, sobre todo, brinda una mayor satisfacción a los individuos; en mi experiencia personal, una atención plena que genera una mejor concentración en las tareas a realizar disminuye los accidentes que llegan a ser tan comunes en negocios dentro del transporte y la agroindustria.
Otro beneficio de este tipo de complementos es que se genera un ambiente y cultura organizacional de concentración efectiva, donde es muy importante que las figuras de liderazgo se comprometan a promover estas prácticas, pero, sobre todo, a dar el ejemplo; y de esta manera incluso podremos medir los resultados al percibir una mayor empatía entre los colaboradores, siendo más comprometidos, con mejores habilidades de comunicación y alguien satisfecho tiende a generar relaciones interpersonales positivas. De ser posible, es importante contar con espacios para meditación y descanso, como el ejemplo del ITAM que mencionaba anteriormente.
Funcionar en modo automático puede llegar a resolver algunas situaciones, tanto laborales como de la vida cotidiana, pero desarrollar las habilidades de concentración y conciencia nos ayuda realmente a priorizar nuestras tareas, obteniendo más que los resultados esperados y es algo que cualquiera con un puesto de liderazgo no puede descuidar y, por lo contrario, buscar desarrollar estas habilidades día a día.
Muchos podrán decir que no existe el tiempo para este tipo de prácticas, pero realmente resulta más sencillo de lo que nos imaginamos, con prácticas muy sencillas, así como más personas con amplio conocimiento en el tema y a nuestro alcance que pueden guiarnos en el proceso; ejemplo de esto podemos identificar que al inicio de nuestro día es cuando podemos llegar a sentir mayor estrés o ansiedad al tener por delante toda una jornada llena de responsabilidades y decisiones por tomar; para evitar que estos sentimientos crezcan o se apoderen de nosotros, podemos pasar unos minutos en la cama sólo concentrándonos en nuestra respiración, sin dejar que nuestro enfoque se distraiga con los pensamientos que puedan ir surgiendo y sólo concentrarnos en la respiración.
De igual forma al llegar a la oficina, o si la forma de trasladarte te lo permite, puedes tomar unos diez minutos para hacer un ejercicio de mindfulness, que desde hace tiempo me recomendaron para estimular el cerebro: cerrar los ojos, relajarte, sentarte con la espalda recta y concentrarte sólo en tu respiración, que durante esos diez minutos tu atención se mantenga en la experiencia de respirar, puedes apoyarte para concentrarte contando tus exhalaciones, pero sobre todo que cuando algún otro pensamiento quiera interrumpirte, regreses tu concentración priorizando el inhalar y exhalar. No parece la gran cosa o para algunos sería pérdida de tiempo, pero en lo personal me ha ayudado bastante tanto al inicio como en diferentes momentos del día y que puedo llegar hacerlo.
Estos simples ejercicios, entre otros, son con el propósito de en verdad desarrollar como antes mencionaba la “concentración”, que es lo que nos ayuda a focalizar lo que estamos haciendo en cada momento y la “conciencia”, que es la capacidad de reconocer y dejar ir las distracciones que se nos van presentando. Todo esto para fomentar una mente clara y aguda que nos permita priorizar de una manera correcta y así cumplir a cabalidad y con la menos cantidad de obstáculos posibles, llegando a la satisfacción de un día verdaderamente aprovechado.
Esta atención plena y ejercicios nos pueden ayudar en momentos donde la mente ya está cansada, así como a desarrollar resiliencia ante las situaciones que puedan llegar a presentarse.
De igual forma lo que aquí les comparto es una simple opinión personal generalizada, pero a quienes estén más interesados, podemos aprovechar que en nuestra época se ha vuelto una tendencia social altamente popular, teniendo a nuestro alcance personas capacitadas para ofrecernos este conocimiento, ya sea de manera individual, grupal o para cursos directo en las empresas, además de poder desconectarnos al asistir a diferentes tipos de experiencias donde la naturaleza, el ejercicio y la meditación se mezclan o hasta para los casos de las agendas más apretadas o personas en constante movimiento, las nuevas tecnologías ponen a nuestro alcance todo lo que realmente nos llegue a interesar, dándonos múltiples opciones de cómo desarrollar esta herramienta, de la mano con los expertos y métodos adecuados.
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