¿Vuelve la izquierda a América Latina?

¿Vuelve la izquierda a América Latina?

febrero 25, 2021 Desactivado Por La Opinión de

El cambio de siglo vino acompañado de un giro a la izquierda en América Latina. La crisis en el precio de las materias primas pareció poner en crisis el avance del progresismo y abrió la discusión sobre un posible viraje a la derecha. La llegada al poder de Mauricio Macri en Argentina, de Jair Bolsonaro en Brasil o Sebastián Piñeira en Chile parecía apuntar en esa dirección. Unos años después, y tras el brutal impacto de la crisis sanitaria, parece que el péndulo vuelve a moverse en la región.

La victoria de Luis Arce en Bolivia puso fin a la presidencia interina de la conservadora Jeanine Añez. Antes de eso, Alberto Fernández había llegado al poder en Argentina y Andrés Manuel López Obrador había hecho lo propio en México. En Ecuador, la primera vuelta dejó mejor posicionado al candidato de izquierdas, Andrés Arauz, frente al conservador Guillermo Lasso. ¿Qué pasará en las próximas elecciones presidenciales y legislativas de Perú en abril? ¿y en las constituyentes de Chile? ¿se abrirá un nuevo ciclo de izquierda en Latinoamérica?

Al igual que la crisis en los precios de las materias primas puso en jaque el proyecto de la izquierda, parece que la actual pandemia ha evidenciado las sombras de los gobiernos de corte más liberal o conservador. Los altos costes humanos y materiales derivados de la pandemia, la incertidumbre hacia el futuro o el aumento de la desigualdad, unido a los problemas estructurales de la región, han jugado en contra de las expectativas de amplios sectores de la sociedad.

Líderes como Bolsonaro han visto caer sus apoyos de manera estrepitosa, con una popularidad que apenas alcanza el 31%. La gestión de Duque en Colombia también está siendo profundamente cuestionada y, en el caso de Piñera, ni la reforma constitucional ha logrado mejorar su aprobación entre los chilenos por encima del 25%. Por si no fuera suficiente el desgaste de los líderes situados a la derecha del espectro ideológico, la victoria de Biden en los Estados Unidos ha supuesto también un cambio de timón en la política del vecino del norte.

La izquierda puede volver a tener una oportunidad para liderar el rumbo de la región. No obstante, no será tarea fácil. Por delante queda la gestión de la pandemia, los efectos de una crisis económica cuyas consecuencias ya se están comenzando a percibir y las consecuencias sociales derivadas de ella. Junto a esto, no debe olvidarse de abordar los viejos retos, tales como la mejora en la calidad de la democracia de los diferentes países y la introducción de políticas que favorezcan una mayor cohesión social o disminuyan el avance de la violencia. Todo ello, evitando cometer los viejos errores del pasado. La estrategia populista, el excesivo intervencionismo o el cobijo a la corrupción son lacras de las cuales una izquierda responsable debe desligarse.

Hemos entrado en un año clave para la región. Los diferentes comicios programados para los próximos meses definirán si, efectivamente, se está produciendo una reconfiguración ideológica. La vuelta de las protestas, la baja aprobación de los líderes políticos, el desgaste de los ciudadanos y el desesperanzador escenario económico son un campo de cultivo idóneo para el cambio. La incertidumbre está sembrada. Veamos que nos deparan los diferentes procesos electorales y votemos de manera pragmática, sin dejarnos confundir por cantos de sirena. Y, hasta que llegue el cambio, si es que llega, sigamos de cerca la gestión de los actuales mandatarios y exijamos la mayor responsabilidad posible en estos tiempos tan complicados. No es tiempo de palabras o discursos bonitos, sino de políticas efectivas. El movimiento se demuestra andando.

Mélany Barragán
Twitter: @MelanyBarragan7


Imagen: Pexels / pixabay.com 

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