Error de octubre y las otras consultas
octubre 29, 2018La semana pasada se llevó a cabo la “consulta ciudadana” para decidir el futuro del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), convocada por el Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), sin ninguna base jurídica.
Esta consulta no tuvo fundamento constitucional o legal, se debatió mucho si era ilegal, alegal o extralegal; la organizó un partido político, Morena; las boletas no estaban foliadas ni contaban con medidas de seguridad. Durante los cuatro días de “consulta”, los medios de comunicación y los ciudadanos evidenciaron las deficiencias de la misma: la aplicación “se cayó” el primer día, se podía votar más de una vez y sin identificación, la tinta “indeleble” se borraba, entre otras.
En el artículo 35 constitucional se establecen los derechos de los ciudadanos, uno de ellos, consagrado en la fracción VIII, es “votar en las consultas populares sobre temas de trascendencia nacional”; sin embargo, para las consultas populares, contempladas en el artículo citado, se establece un procedimiento: la consulta debe ser solicitada por el Presidente de la República, por el 33% de los integrantes de la Cámara de Diputados o del Senado de la República o por el 2% de los ciudadanos inscritos en la lista nominal; y ser convocada por el Congreso de la Unión.
La consulta tiene que ser organizada por el Instituto Nacional Electoral (INE); llevarse a cabo el día de la jornada electoral federal, es decir, sólo puede realizarse cada tres años; además para que los resultados sean vinculatorios tiene que haber al menos un 40% de participación ciudadana.
En un video difundido en redes sociales, relacionado con la “consulta” del aeropuerto, López Obrador dijo: “a mis adversarios les digo que se vayan acostumbrando, porque cada vez que sea necesario, cuando se amerite, va la consulta; es más, vamos a reformar la Constitución para que no haya límites y los ciudadanos puedan solicitar, cuando haya un tema de interés público, que se haga una consulta”. La cuestionada “consulta” sobre el aeropuerto ya pasó y el Presidente electo decidió cancelar el magno proyecto del aeropuerto en Texcoco, cargándole la responsabilidad al “pueblo bueno y sabio”, con todas las repercusiones que ello conlleve.
El 1 de diciembre, Andrés Manuel asumirá el cargo de Presidente de la República; el 1 septiembre entró la nueva legislatura federal, Morena y sus aliados tienen mayoría en la Cámara de Diputados y en el Senado de la República; se reformará la Constitución para flexibilizar los requisitos de los consultas populares, lo deseable es que las las siguientes las organice el INE y cuenten con medidas de seguridad y certeza jurídica y de imparcialidad.
Y como AMLO ha inaugurado la era de las consultas ciudadanas, muchos mexicanos ya esperan las próximas:
1. El Tren Maya, porque provocará un ecocidio en la selva del sureste, aunque el Presidente electo se empeñe el decir que los ciudadanos respaldan el proyecto, de acuerdo a una encuesta (lo cual también sucedía con el proyecto de Texcoco), y que no habrá daños al medio ambiente; quizá pronto aparezca el movimiento #PrefieroLaSelva.
2. La reducción del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), que impacta en el precio de la gasolina y el diésel; y que durante la campaña el Presidente electo y los candidatos de morena se cansaron de decir que bajaría el precio de los combustibles. Ni siquiera debería de someterse a consulta, pero acudamos a la voz del pueblo, para que a Andrés Manuel le quede claro que debe cumplir sus promesas de campaña.
3. La descentralización administrativa y el cambio de sede de las secretarías de estado, tan anunciada durante la campaña, debido a los costos que implicaría, para el erario, mover la infraestructura de las secretarías y los costos personales para los trabajadores de estas dependencias; además de lo complejo que resultaría para el ciudadano la realización de trámites en distintas secretarías dispersas a lo largo y ancho del país.
Esperemos que la era de las consultas traiga una verdadera participación ciudadana en las decisiones del país; de lo contrario el gobierno lopezobradorista estará basado en la simulación para legitimar caprichos personales.
LA CUADRATURA
La base militar de Santa Lucía está asentada sobre los lagos Xaltenco y Zumpango, ¿los “defensores” del (inexistente) lago de Texcoco también defenderán estos otros dos lagos?
