López no entregará la Presidencia

Al más puro estilo autoritario que lo caracteriza, Andrés Manuel López Obrador se resiste a entregar la Presidencia pro tempore de la Alianza del Pacífico, porque en el orden de sucesión establecido para encabezar este organismo multilateral, el siguiente país en presidirlo es Perú.

López Obrador se niega a llevar a cabo el traspaso oficial de la Presidencia de la asociación, una vez finalizado el mandato de México. “No quiero entregar a un gobierno que considero espurio”, expresó en días pasados.

El presidente mexicano siempre ha utilizado a su conveniencia la Doctrina Estrada, política exterior consistente en la no intervención y la autodeterminación de los pueblos; guarda silencio ante los que sucede en Cuba, Venezuela y Nicaragua, pero levanta la voz para defender a los dictadores en desgracia.

El comunista Pedro Castillo intentó disolver el Congreso del Perú el 7 de diciembre de 2022, llamar a nuevas elecciones legislativas y establecer un “gobierno de excepción”; el Tribunal Constitucional llamó a las Fuerzas Armadas para el restablecimiento del orden constitucional; el Congreso por mayoría de votos destituyó a Castillo, debido a la “permanente incapacidad moral” para gobernar, a consecuencia de investigaciones de corrupción; fue detenido y acusado, además, por el “delito de rebelión”, al quebrantar el orden constitucional del país; finalmente, Dina Boluarte, primera vicepresidenta, asumió la Presidencia del Perú, de acuerdo a lo establecido en los artículos 114 y 115 de la Constitución Política del Perú.

A más de dos meses de lo ocurrido en el país andino, México no ha reconocido a Boluarte, lo que ha generado varias fricciones diplomáticas y pone en riesgo la supervivencia de este organismo latinoamericano.

La Alianza del Pacífico nació el 28 de abril de 2011, como una iniciativa de integración regional formada por Chile, Colombia, México y Perú, con la finalidad de conformar un área de integración profunda para impulsar un mayor crecimiento, desarrollo y competitividad de las economías que la integran, mediante la búsqueda progresiva de la libre circulación de bienes, servicios, capitales y personas; y convertirse en una plataforma de integración económica y comercial con proyección hacia la región Asia-Pacífico.

La Presidencia pro tempore de la Alianza debe ser ejercida sucesivamente por el representante de cada uno de los estados miembros, en orden alfabético (Chile, Colombia, México y Perú), por un periodo de un año; el 26 de enero de 2022, México la recibió de Colombia, con la ausencia de López Obrador, pues éste envió en su representación a Rogelio Ramírez de la O, secretario de Hacienda y Crédito Público; con ello el mexicano mostró su desdén no sólo por la propia Alianza, sino también por los países miembros y por los jefes de Estado de éstos.

A López Obrador le importa muy poco o nada que la Alianza del Pacífico represente una oportunidad para fortalecer la economía del país y generar mayor crecimiento y desarrollo, a través del comercio y la inversión; para él lo más importante es imponer su voluntad y destruir instituciones en México, y ahora en Latinoamérica.

LA CUADRATURA

Con eso de que México condecora a dictadores, ¿Daniel Ortega será el siguiente homenajeado por López Obrador?

Alberto Lugo Ledesma
Twitter: @albertolugomx

Imagen: Internet